¿Qué es un Plan de Viabilidad y para qué sirve?
Un plan de viabilidad es una herramienta que te permite anticipar si un proyecto es razonablemente rentable; por tanto será una estimación del futuro, un vaticinio, pero asentado y fundamentado en la lógica y solo en esta. Por descontado debe tenerse en cuenta que dicho plan no se cumplirá en su totalidad, porque habrá numerosas situaciones que habremos considerado de forma distinta a cómo el futuro verifique. Vemos por tanto que esos son los aspectos primordiales de un plan de viabilidad, el ser una herramienta, como tal debe usarse antes de tomar la decisión de inversión, pero si se decide invertir, después debe seguir siendo, al menos en los primeros ejercicios del proyecto, a dónde acudir para medir la realidad del mismo y ajustándolo a la realidad para proponerse objetivos asumibles según la experiencia.
¿Cómo hacer un Plan de Viabilidad?
Debe tenerse en cuenta que los proyectos deportivos son parecidos a cualquier otro proyecto en cuanto a su viabilidad, puesto que habrá que buscar la rentabilidad, el ahorro, las necesidades de inversión y la adecuación y alineamiento de los distintos factores para conseguir la ansiada viabilidad. Aunque también es cierto que los proyectos deportivos tienen algunos componentes especiales del sector.
Las especialidades deportivas pasan por conocer los precios habituales, la temporalidad ínsita de los servicios deportivos, así como los mecanismos de gestión y de mantenimiento para conseguir una durabilidad más amplia de las inversiones hechas. Además, es conveniente conocer que el mercado deportivo se asienta en distintos niveles socioeconómicos muy relacionados con concretas marcas del sector.
Lo anterior a todo, como en un examen, es empaparse de la idea del proyecto, si es un Club deportivo o la explotación de una instalación existente o la construcción de una nueva, pues simplemente pensarla en términos generales, qué se quiere hacer con ella, dónde se ubica y con quien tendría que competir. En este mero pensar se nos delimita a veces de forma directa algunas cuestiones que pueden ser relevantes; pero por supuesto no estamos más que ante una toma de contacto con la idea que tenemos del mismo. Ahora es cuando hay que empezar a trabajarlo.
¿Qué puntos abordar?
Lo primero es saber la ubicación del mismo (en aquellos casos en que el proyecto se desarrolla siempre en el mismo lugar) y el público objetivo. La ubicación nos dará el entorno socio económico y los números de habitantes que puedan ser potenciales deportistas en nuestro proyecto, por supuesto habrá que tener en cuenta las carreteras, instalaciones cercanas, población, orientación de la parcela, así como de las pistas a instalar, para obtener un estudio de mercado que nos dé como resultado el potencial de deportistas reales y la previsión de dichos deportistas en los años que se prevea el proyecto. En los casos en que el proyecto se desarrolle en varios sitios habrá que centrarse en el público objetivo y el potencial de captación que se pretenda.
Una vez analizado el entorno físico es prudente analizar la población del entorno de forma segmentada, es decir, diferenciando usos por género y por edad, para vislumbrar el potencial de crecimiento y mejora, así como los usos de la población objetivo (no es lo mismo una población de poca iniciativa deportiva a otra que sí lo sea).
Más adelante es posible, y siempre es bueno, aunque no siempre se deje por escrito, hacer un análisis político, económico, social, tecnológico, ecológico y legal sobre la oportunidad del proyecto y la verificación de realización el proyecto. No es más que estudiar la situación general desde todos esos puntos de vista para ver cómo influyen en el proyecto.
Seguidamente lo que procede es hacer un análisis sobre las Fortalezas y Debilidades, así como de las Oportunidades y Amenazas, que, si bien suele insertarse en este punto, lo ideal es hacerlo al final del proyecto para tomar en dicho análisis las variables económicas que serán relevantes a lo largo del mismo. Y puntuarlas para detallar cuáles son los puntos clave del proyecto, tanto positivos como negativos.
Un plan de marketing suele ser una herramienta bastante buena para poder alinear las vías de comunicación a los intereses del proyecto, y en el momento del plan de viabilidad puede ser un buen momento para analizar y sentar las bases originales de la misma.
Una línea destacada también es el plan organizativo de la entidad con los recursos humanos disponibles y sus competencias funcionales. En esta parte es fundamental saber y optar a los perfiles más idóneos del personal a contratar. Este plan organizativo se puede complementar con un plan operacional que aúna los mantenimientos y necesidades del proyecto (desde las limpiezas de pistas, al alquiler, renovación etcétera) e incluir el plan de gestión considerado para el proyecto.
La parte determinante del todo el trabajo previo y del que se nutre este último apartado es el plan económico financiero. Este plan sirve para afrontar los años futuros, normalmente, salvo contadas excepciones, con una futurización a 3 ó 5 años. En esta parte lo razonable es tomar conciencia de los ingresos y gastos, así como de sus evoluciones en el tiempo y de la forma en que se genera, también de las fluctuaciones de tesorería a lo largo del proyecto y sus tendencias previstas. Y por supuesto buscar los mejores indicadores (ratios), que ayuden a explicar las previsiones y en el futuro del proyecto sirvan para la mejor gestión y control del mismo.
Toda la materia acumulada dará como resultado la conclusión del proyecto como tal. Dicha conclusión se ceñirá al resumen de si el plan en rentable y viable, así como la explicación de las causas y consecuencias del mantenimiento del proyecto en el tiempo.
Por todo lo expuesto el plan de viabilidad es la forma lógica para vislumbrar si ese sueño que tenemos, si esa idea que nos ilusiona es posible o no desde un punto de vista económico, y qué esfuerzos o inversiones necesitará.
En caso de cualquier duda o consulta, podréis contactar con nosotros.
CLC LEGAL & SPORT
D. Pablo Lucena Jurado
Director Departamento Económico-Financiero
Abogado